La inteligencia artificial (IA) potencia la toma de decisiones empresariales al acelerar el procesamiento de datos y mejorar la precisión del análisis. El verdadero valor ya no reside únicamente en recopilar información, sino en convertirla en conocimiento accionable de forma automatizada y en tiempo real. Mediante la automatización de tareas complejas y la identificación de patrones, la IA permite que respondas de forma ágil y fundamentada ante escenarios cambiantes. Esto reduce los tiempos de respuesta y minimiza errores en procesos críticos. En este artículo te explicamos cómo aplicar IA en cada etapa del análisis y la toma de decisiones. También conocerás cómo DIMA te ayuda a gestionar tus datos con mayor eficiencia operativa y enfoque en resultados.